Está situado en las faldas de una montaña, que lleva su mismo nombre, encontrándose, en la parte alta de la misma, las ruinas del Monasterio de la Orden de los Jerónimos (S.XV) y, cerca de él, la Ermita de la Esperanza. El acontecer histórico-documental del manantial se inicia en el año 1251, con motivo  de la reconquista cuando Jaime I de Aragón ordena la división de las aguas. Sin embargo, desde entonces ha habido  distintas variaciones  de este primer reparto, cuyo resultado es que el municipio quede beneficiario de las aguas de la Esperanza por dos rollos o tomas, la de su propio nombre y la del Brazal.

Actualmente, el Manantial abastece a la población de NAVAJAS, Altura y Segorbe, tanto para su consumo diario como para su riego. De hecho, tal cantidad de agua ha propiciado que en sus tierras exista una fértil huerta en la que se cultivan hortalizas, numerosos árboles frutales de regadío (manzanos, perales, cerezos, naranjos, nispereros, etc.), así como de secano (almendros, algarrobos y olivos).

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